90.- Freak For Free

Ok, tengo claro que los domingos son bien webiados, pero el más reciente tuvo algo aún más notablemente extraño.

Para empezar, desperté antes de las 11:30 y como han de imaginar, mi primer instinto fue estirarme un rato y prender el computador. Estaba como "no conectado", ya que no quería hablar con nadie, cuando en eso me llama Yin nuevamente:

[Voz de tuto mode: ON]

- Alo?
- Washo!, tabai durmiendo?
- Sí mas o menos, como estai?
- Aquí...más o menos, NO HAY LUZ!!
- Ajá!, eso significa que no hay agua caliente pa ducharse!
- Nooooo...!
- Uhmmm
- Y NO HAY PA HACER ALMUERZO!
- Pero washo, si tu cocina es a gas, solo el chispero es eléctrico!
- PERO NO TENGO FOOOOOSFOROS!
- Uhmmm....es secillo, te vienes, cocinamos y te bañas aquí poh!
- Ya!, voy pa allá


Así, llegó a comer, almorzamos puré con vienesas y ensalada a la chilena, para luego salir a eso de las 15:00 horas a un partido de futbol que tenía mi estimada por allá en las montañas de Heidi.

Llegamos al lugar, y yo mientras miraba sentada cómodamente a la sombra, en una silla, arriba en la terraza, pensaba: juguitos de pelota!, miren que asarse así lentamen....


- HOLA! -di vuelta lentamente mi cabeza para ver al ser que me gritaba el saludo
- HOLA!, DISCULPA, DE QUE PAÍS ERES TUUU?

Y su tono chillón lo ví justificado en su clara expresión de alguna enfermedad mental

- De Chile... -dije tranquilamente, volviendo mi mirada al partido
- ¿Y DE QUE CIUDAAAAD? -su tono ya se me hacía molesto
- Santiago
- Y DONDE VIVES?
- En Santiago de Chile!
- ¿Sabes cual es mi sueño? -en ese momento yo pensé "¿por qué a mi we-ón!?"
- A decir verdad, no
- ¿Disculpa, cual es tu nombre?
- Bárbara
- Bárbara, ¿tu sabes cual es mi sueño?
- Acabo de decirte que no
- Bueno Bárbara, mi sueño es ir a Cuba, ¿sabes por qué?
- No...
- Por que Cuba es un lugar muy lindo, yo lo que quiero Bárbara es lo siguiente: Irme a Cuba, crecer en Cuba, estudiar en Cuba, conocer a una cubana, casarme con ella, tener hijos cubanos, envejecer en Cuba y que me entierren en Cuba, lo que quiero Bárbara es lo siguiente: Irme a Cuba, crecer en Cuba, estudiar en Cuba, conocer a una cubana, casarme con ella, tener hijos cubanos, envejecer en Cuba y que me entierren en Cuba...
- ...ok
- Bárbara hay otra cosa que te quiero decir
- dime
- Yo odio a los negros!, los mataría a todos!

Nota del editor: Sí, quien escribe es bastante morena, por lo que ud. comprenderá que se sintió incómoda y amenazada.

- ya...?
- Sí, mira, yo los odio por 18 razones, las cuales te diré enseguida...

Despues de escuchar sus razones que eran 18, tal cual me dijo y repetirlas, tal como cada cosa que me decía, mi espanto iba aumentando.

- Bueno Bárbara, ahora te quiero decir como mataría a los negros.

UUUUUUUUUUUUUHHH!!!, si usted cree que yo me sentí vulnerable antre tremendo pailón, piteado del mate, que me hablaba de matar a la gente más oscura que él, está en todo lo correcto!

Así, el loco culiao me contó varias maneras de matar a lo que el consideraba "despreciable raza negra", cuando yo creí que la conversación ya tenía su climax de locura, me dijo:

- Bárbara, yo estoy enamorado.
- Sí?
- Sí, estoy enamorado de una niña que se llama C. Morales, ¿tu la conoces?
- Ehh, no no la conozco.
- Bueno ella tiene diez años, es blanquita, rubia, es...rica!, yo quiero casarme con ella, hacerle cosas y llevarmela lejos.

Este fue el momento en el que yo ya quería que parara, imaginé si esa niña realmente existía o era algun recuerdo vago de su mente. El representa algo mas de 20 años, así es que de ser real, me asusta mucho.
Yin jugaba futbol y yo por prestarle atención a este extraño, no podía ver a quien realmente iba a ver, así es que el desagrado iba en aumento.

- Bárbara, ¿podemos seguir hablando?
- No, no quiero seguir escuchándote.

Y se alejó, pasmado. No fue agresión de mi parte, el tampoco lo sintió así (afortunadamente), fue simplente decirle lo que yo directamente queria. Y lo que quería era que dejara de hablarme.

Aún pienso en la niña, en si existe, en que tan cercano está él de ella.
Pienso en él, en su odio maniático y estudiado, en que muchas de esas cosas las repetía como una máquina. En que quizás escuchó alguna vez tan solo una sola palabra en contra de la gente negra y en su desequilibrio, cultivó y creció el odio de manera fulminante. Pensé en el acceso a internet que seguramente debe tener como "el hijo tonto con el que me castigó el señor", al que hay que entretener para que deje de joder un rato.

Y quizás me toque verlo más de alguna otra vez. Quizás no le recrimine por el odio que siente.

A decir verdad, este encuentro de mierda, me sirvió para analizar mis propios odios.

Y agradezco a pesar del miedo, que este ser se atravesare en mi camino, en mi mente, para poder crecer, soltar y avanzar.


*siempre.

Nota 2 del editor: Curiosamente ayer, pude volver a dibujar.